A lo largo del siglo XVIII y XIX Sitges protagonizó una de las oleadas migratorias hacia América más importantes del territorio catalán. Se • instalaron primeramente por toda la costa americana desde Argentina, Uruguay, Venezuela, Colombia y hasta México, concentrándose en el s. XIX en Cuba y Puerto Rico. Los emigrantes y comerciantes de Sitges establecieron una red al nuevo mundo que les permitió exportar vinos y después el calzado que producÃa. Algunos mantuvieron e hicieron crecer sus negocios allà por bastante tiempo, como Facundo Bacardi o Andreu Brugal. Otros volvieron a su ciudad natal, desde donde participaron en el desarrollo industrial de Cataluña, y donde fueron los artÃfices de la transformación urbanÃstica de la ciudad, con la compraventa de viñedos, solares, y edificaciones. Los americanos que lograron éxito económico se construyeron lujosas casas, de las que se conserva una rica muestra de los estilos neoclásico, ecléctico, modernista y racionalista.
